En un mercado vacío de actitud, devastado por las marcas de molde que se centran en el esfuerzo físico casposo, y en la importancia sudorosa de la imagen exterior… el destino, fresco y caprichoso, puso en una misma pista a los tres protagonistas de esta historia.

En una mañana de invierno cualquiera, tres raquetas se unieron, como un relámpago cálido que rompe el hielo de lo desconocido, para luchar contra esa injusticia que asola al mundo del Padel. Tres personas muy diferentes, que provenían de mundos diferentes: digital,  moda y diseño-creatividad, y que súbitamente conectaron descubriendo que tenían un feeling común:

— Nos encantaría llevar a cabo un proyecto relacionado con el Padel, que rompa con lo establecido, que mejore nuestra vida y la de todos los que nos rodean en el día a día.

Un proyecto que pueda dejar huella, que pueda transformar el mundo, aunque sea sólo un poquito, en un lugar mejor. Que canalice toda la fuerza y la garra que ponemos practicando nuestro deporte favorito en una energía vital que se contagie como un virus repleto de carga positiva y felicidad: Vamos a crear el EFECTO WOW.

Pero surgió una importante pregunta: ¿Cómo transmitir esto con una Marca?

Y surgieron respuestas como garra, fuerza interior, lealtad, confianza… que se mezclaron con mucha actitud: indomable, natural, salvaje, diferente, sin temor… Ese mix proyectó  una sombra que fue cobrando más y más forma, una imagen clara: ¡Un Lobo!

Pero ya que vamos a hacer realidad un sueño común, ¿cuál es el sueño más recurrente de cada uno, cuando se siente invencible, feliz, en paz, lleno de energía? Y la respuesta fue unánime: He soñado que vuelo, tan alto como quiero.

Por eso, somos como un lobo que no se conforma con aullar a la luna, sino que aspira a volar hasta ella. Por eso, somos WOLF ON WINGS. Una marca que trae una nueva visión que va a poner patas arriba el mundo del Padel. —

Y así comienza la leyenda del EFECTO WOW y LOS TRES MOSQUETEROS DEL PADEL.

Uno para todos, y todos para uno..